Hasta siempre, Ceci

En una eucaristía comunitaria sencilla y marcada por testimonios emotivos y cariñosos, la Comunidad dio simbólicamente el adiós a Cecilia Ayres, quien partió al encuentro del Señor el pasado lunes 1° de febrero a consecuencia de un cáncer que afectó a sus pulmones. Ceci, que pertenecía al grupo Jerusalén y era integrante activo de la Comisión de Liturgia, era valorada por todos los comunos por su generosidad, por su incansable capacidad de servicio, por su sencillez, disponibilidad y alegría permanentes. Incluso durante los días de su enfermedad dio muestras de una enorme fe. Su hija Ana Cristina, quien reside en Canadá con su familia, estuvo en la Eucaristía con su esposo e hijos, y agradeció al final el cariño de todos hacia su mamá.

Ceci, nos precedes en el camino al Padre. Ruega a Él por nosotros.