1982

Año clave para el resurgimiento de la Comunidad. En marzo, la Asamblea y Consejo Comunitarios aprobaron los primeros Estatutos y se establecieron las instancias comunitarias que funcionarían durante las siguientes décadas, particularmente la Junta de Coordinadores, formada ahora por los coordinadores de grupos (y no ya de "áreas"). Se estableció el pago de cuotas de los miembros para sostener la Comunidad. Asimismo, el trabajo pastoral y la proyección social fueron abundantes, particularmente la catequesis en sectores escolares y universitarios. Abundaron las iniciativas individuales en distintos sectores. De hecho, fue un tiempo de significativo activismo. A nivel de vida de oración y liturgia, se inició la costumbre de realizar un retiro anual para los miembros de la Comunidad, así como la de vivir juntos la celebración de la Semana Santa.

La vida comunitaria estuvo mucho más claramente asentada sobre el funcionamiento de los "Grupos de Reflexión" o pequeñas comunidades de vida. Aunque durante el año se disolvió Desde la Vida II, se incorporó a la vida comunitaria el grupo Amén, de chicos recién confirmados. El DECA reaparece como informativo mensual. Un hecho clave es la asunción de la asesoría comunitaria por parte del P. José Luis Ramírez Cisnaga. Fue también clave la creciente exigencia de testimonio de vida, misma que determinó la separación de tres miembros por antitestimonio. El contacto con otros grupos juveniles ss.cc. fue perdiéndose, aunque en cambio se iniciaron algunos contactos con grupos como UNEC y CVX. Se emitieron también algunos comunicados a nombre de la Comunidad, respondiendo a críticas gubernamentales con respecto a la acción y denuncia social de la Iglesia.

Coordinador(a) General: 

General Juan Borea

Sub Coordinador(a) General: 

Jaime Gálvez