El domingo 18 de febrero, a partir de las 10:00 de la mañana, se realizó la Asamblea anual de la Comunidad SS.CC. Héctor de Cárdenas. La primera desde que dejamos el local de San Joaquín, en Belén. Una serie de infortunadas coincidencias (viajes familiares o de trabajo, enfermedad de seres queridos, visitas sorpresa, etc.) se alinearon para que la asistencia no fuera la esperada. Aun así, casi una treintena de comunos se hizo presente a lo largo de ese día para evaluar la marcha de la Comunidad y pensar en su futuro.
Luego de leer el Evangelio y hacer una invocación al Espíritu Santo, se pasó a un informe esquemático de lo que había sucedido durante el 2023 en las distintas dimensiones comunitarias: a nombre del Consejo de Hermanos, Juan Carlos dio una vista panorámica de los trabajos pastorales, la formación, las posturas frente a coyunturas nacionales, la vida litúrgica, la inserción en la vida de la Iglesia, la comunicación interna, los grupos de reflexión, etc. Luego, le dio pase a Katya quien, como tesorera, hizo un informe de la economía de la Comuna. El resto de la mañana se dedicó a evaluar la marcha de la Comunidad a partir de las líneas de acción que se había propuesto hace un año en la Asamblea 2023. Los presentes se dividieron en grupos pequeños y pasaron la siguiente hora y media comentando y proponiendo.
El plenario tuvo que ser interrumpido por la hora de almuerzo y, después, la celebración de la Misa Comunitaria, para la cual vino el querido José Serrand.
A lo largo de la tarde, se retomó la discusión y se plantearon algunos lineamientos:
- La importancia de seguir potenciando nuestra dimensión pastoral (que ha revivido notablemente durante el 2023) con especial atención a fomentar el auto sostenimiento y el desarrollo, evitando quedarnos en lo meramente asistencial.
- Optimizar la comunicación con y entre los comunos, recurriendo a las herramientas siempre nuevas de la tecnología (como por ejemplo las comunidades de Whatsapp, TikTok, etc.)
- Abrir más espacios de formación, pero recogiendo para ello las necesidades e inquietudes de los grupos de reflexión, sin pretender uniformizar lo que cada comuno requiere.
También aparecieron en la discusión: la preocupación por el funcionamiento real de los grupos de reflexión, la asistencia a misa de los comunos ahora que no tenemos misas comunitarias semanales, los retos que implica volver a tener un grupo de Iniciación de adolescentes y, por supuesto, el tema del local que, luego de una larga discusión, se inclinó hacia mudar la Comunidad a uno de los departamentos en el predio donde viven Rafael y Juan Carlos.
Finalmente, se eligió al nuevo Consejo de Hermanos, conformado por Mauricio Muñoz-Nájar (Hermano Mayor), Elia Méndez, Katya Delgado y Rafael Soto.
