El inicio de este período es marcado por la reflexión en Asamblea, motivada por el Consejo de Hermanos saliente, reflexión que vuelve a valorar la existencia estable de la misa comunitaria, así como la pertenencia a una comunidad grande más allá de los grupos de reflexión, pero también reclama mayores espacios para toda la familia y una vivencia más emocional (y no sólo intelectual) de la fe, entre otras cosas. Un signo interesante es que, por primera vez en la historia comunitaria, no hay propuestas de candidatos, sino voluntarios para el siguiente Consejo de Hermanos. Y una vez más, repunta la asistencia a la misa comunitaria, aunque vuelve a retroceder luego de algunos meses. Salvo Contemplemus, que entra en crisis, los demás grupos se reúnen con regularidad, y los documentos del Papa Francisco son claramente los preferidos para trabajar la formación. Hay además una serie de reuniones intergrupales.
La súbita muerte de Ceci Ayres, del grupo Jerusalén, y los serios problemas de salud de Renato Espinoza y Pam Martínez son golpes fuertes para la Comunidad. Se fortalecen los espacios de encuentro y oración virtuales: el Consejo convoca para el Día de la Tierra, respondiendo al llamado del Papa Francisco; en febrero por Miércoles de Ceniza; y en junio por los niños de Siria, en el día internacional de la niñez; en todos los casos, se envió una guía sencilla y se motivó a la participacion de cada comuno "desde donde estuviera". En la misma línea, fue tomando mayor fuerza el grupo de oración virtual por los enfermos, iniciado por Vania Híjar.
La relación con la Rama Secular también se fortalece. Cuatro comunos (Juan Borea, Daniel Gushiken, Juan Carlos Townsend y Claudia Rojas) viajan a Chile para participar del VII Encuentro Latinoamericano de la Rama Secular ss.cc. Posteriormente, el Consejo de Hermanos recibe el encargo de recoger información sobre la vida comunitaria a partir de tres preguntas enviadas desde Chile. Luego de "traducirlas" a un lenguaje más concreto, las envía a los grupos de reflexión y sistematiza las respuestas. Además, se participa en una jornada formativa de la Rama Secular en el Belén.
Gastón presenta su libro "Espero confiado en el Señor" y, poco tiempo después, recibe las Palmas Magisteriales. Además, ese año nace la hija menor de Vania y Félix, y la primogénita de Mili y Jimmy.
El trabajo en Brisas de Villa perfecciona su organización e incorpora a voluntarios "aportantes" para mantener económicamente el voluntariado; en ello es clave la incorporación al equipo de Karina Miranda. Hay tres colectas solidarias en el año: para ORES y las comunidades ashaninkas; para los damnificados del terremoto en Ecuador; y para la tómbola de Plaza Francia. Se emite un comunicado sobre los derrames de petróleo en la selva peruana. Se rediseña la página web comunitaria. Hay además varios espacios de integración comunitaria, en casa de Juan Carlos Townsend y en casa de Angie Fort; ambos fueron ocasión festiva de compartir con las familias, ver películas, celebrar la Eucaristía. Y se generan los encuentros de Cine Fórum en casa de Mariella y Eduardo, en que luego de ver una película previamente escogida, se reflexiona comunitariamente sobre el contenido.
